sábado, 1 de mayo de 2010

GridIron (I)


Decía el filósofo que el "sopor" es ese líquido, viscoso y pesado, que todo lo inunda. La verdad es que los fanáticos de la NFL sabemos que estos meses son nuestra particular travesía del desierto. Sí, el draft aporta algo de interés y las transacciones que se han anunciado y se anunciarán nos van aportado esa medicación, mínima y limitada, suficiente para que nos colguemos del primer árbol que encontremos.

Me perdía el otro día por los mundos internáuticos cuando depronto topé con GridIron, una especie de simulación a imitación del mítico Hattrick donde uno debe de combinar la gestión de un equipo de fútbol americano (ofensiva, defensiva y equipos especiales) así como la construcción de un buen estadio y la compraventa de jugadores. Algo muy básico, pero entretenido. Una mísera distracción en espera de la llegada de los partidos de agosto y más allá, en el límite de nuestra paciencia, los primeros encuentros de temporada que no llegarán hasta el lejano septiembre, ah! y la NFL fantasy, claro!.

Tras registrarnos y recibir un email confirmando usuario y contraseña, pasaremos a engrosar la lista de espera de turno. Menos de 12 horas después nos remitirán otro email en el cual se nos avisará de que hemos pasado a tomar los mandos de un equipo de futbol americano, con una plantilla mínima, un estadio en mantillas y unas finanzas que administrar.


Deduzco que soy el heredero del equipo antiguamente conocido como Zaragoza Longhorns. Actualmente estoy clasificado en tercera posición tras Team Paris 15, contra quienes me enfrentaré mañana mismo y The Diplomats, invictos en el campeonato. Mi plantilla está compuesta por los siguientes jugadores:




Cada uno de los jugadores tiene unas características especiales, por ejemplo, mi QB:



Cada una de las características es entrenable según para lo que entrenemos. Estas habilidades mejorarán en base al entrenamiento, los partidos jugados (oficiales o amistosos) y lo harán en función de la intensidad de dicho entrenamiento y otros condicionantes (por ejemplo la edad). Evidentemente lo que nos interesará más es desarrollar las características interesantes de acorde al rol del jugador, no servirá de nada que nuestro QB tenga un buen punt pero sí Visión, Pase o Velocidad. De momento, los entrenamientos programados son muy básicos:


También las plantillas son alterables. Existe un mercado de fichajes y traspasos al cual nos podemos ir de compras para fichar a esa estrella -o proyecto de ella-, en modo subasta, es decir, pujando sobre un precio de salida y con una fecha de cierre de la venta: quien pague más se lo lleva!. De igual forma, si asumimos el riesgo, podemos dedicarnos al noble arte de la especulación: comprar barato y vender caro. Realizamos una búsqueda para saber qué RB's están hoy en el mercado, con un precio a partir de 20.000 y obtenemos los siguientes resultados:



De momento, la mayoría de consejos del foro de apoyo recomiendan no lanzarse a comprar a ningún jugador; no tenemos referencia de lo que se puede pagar por cualquier posición y es probable que, o bien nos gastemos más de lo que podemos, o bien nos timen como a un pardillo. Lo que sí coinciden es en ampliar la capacidad del estadio (preferentemente zonas VIP), eso nos proporcionará ingresos con los cuales tendremos más flexibilidad económica. Así es que el coste se deduce de nuestras cuentas iniciales, que empiezan con una transferencia de 250.000, quedando de la siguiente forma:


Y la imagen que ofrecen nuestro estadio, en obras:


Con lo cual deducimos el primer GRAVE error!!!. Dado que nuestro estadio únicamente tenía una zona de gradas en la que hemos decidido incorporar una zona VIP, con las obras iniciadas me he cargado el único espacio que tenía destinado a público!!!!. De ahí que al lado del nombre del estadio JP Stadium, la capacidad sea 0. Deberé esperar que acaben las obras para poder tener algún ingreso. Vamos, que me he cubierto de gloria.

Como último apartado llega lo más importante, las formaciones y órdenes durante un partido. Se trata de dar la "alineación", tanto de la ofensiva como de la defensiva, adjudicando la posición en la que queremos que juegue. De esta forma podemos definir nuestro modo de juego de ataque y defensa:


En este caso y a tenor de la plantilla que tengo, decido jugar con dos WR -en este caso, uno a la derecha y otro a la izquierda-, un TE (izquierda) y dos Halfbacks flanqueando al QB.


Para la defensa jugaré con un Blitz, es decir, dos Tackles y dos Ends (izquierda y derecha) y tres Linebackers. Sitúo a dos Free Safetys para cubrirme las espaldas y los dos Cornerbacks de rigor.


El último punto interesante: las órdenes del partido. Definimos el papel de los equipos especiales. Como no tenemos un QB especialmente destacable en la faceta del pase, ni tampoco unos RB destacados en su papel pero si un WR que parece bueno tanto para la recepción como para la carrera, de momento, por ser el primer partido, damos al QB la capacidad de "repartir juego" y no centrarnos exclusivamente en una forma de ataque -que sería muy fácilmente rebatible-. Luego fijamos en modo % las preferencias con una ligera priorización del juego de pase indicando qué tipo de ataque deberá nuestro equipo realizar (pase o carrera) en primer, segundo y tercer down.

Para el cuarto down nos dan una nueva opción, ¿qué hacemos en esa situación?, ¿chutamos un punt sea cual sea nuestra situación en el campo?, es decir, si estamos a 1 yarda de distancia del first down y a 5 de la end zone, ¿hay que chutar?. Tal como muestra la configuración actual, si en cuarto down estamos a menos de 30 yardas de la línea de anotación, chutaremos un field goal (no un punt). Y una segunda variante, si la distancia es menor de 10 yardas, jugaremos (con un 50% de posibilidades una carrera y otro 50% de pase).

Finalmente las Órdenes de Defensa, en función del down, donde definimos para qué tipo de jugada estará preparada la defensa.

Espero una derrota total y absoluta para el próximo partido. Sin fichajes, sin asistencia de público y con una táctica que, seguro, no será la mejor, la previsión no puede ser excesivamente optimista. Pero señores... menos da una piedra y la temporada real está lejos de empezar!.

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